Los múltiples beneficios de un buen masaje hacen que sean un excelente aliado en la salud y en la estética. Enterate como pueden ayudarte a bajar de peso.
No hay persona en el mundo que no disfrute de una buena sesión de masajes pero sus múltiples beneficios hacen que sean un excelente aliado en la salud y en la estética.
Los masajes reductores se realizan con maniobras de presión y velocidad en las zonas del cuerpo que albergan esa “grasita” que queremos combatir (por ejemplo en la panza) y le dan calor, es decir que es un masaje intenso en las partes del cuerpo que poseen mayor cantidad de células adiposas y que se aplica, generalmente, en la zona abdominal, glúteos y piernas de los pacientes.
Este tipo de masaje, colabora a reducir el volumen y la grasa en zonas específicas del cuerpo ya que intensifican la circulación sanguínea reactivando el metabolismo local y moviliza las grasas para que sean asimiladas y eliminadas de manera correcta. En muchos casos, se utilizan cremas que favorecen a la reducción de grasa debido al calor que generan con la fricción entre las manos y la zona a tratar. Para su correcta colocación, la piel deberá estar limpia y libre de células muertas por lo que se sugiere utilizar en el hogar una crema o jabón exfoliante previo a la sesión. Como resultado reducirás la cantidad de estrías o celulitis causadas por el sobrepeso y moldearás tu cuerpo pero no bajarás de peso considerablemente.
Por otro lado, existe el quiromasaje que se maneja con manipulaciones corporales realizadas exclusivamente con las manos con movimientos suaves, profundos y rítmicos. En este caso, se lo relaciona con la oxigenación de los tejidos para cuerpos que se encuentren con hinchazón debido a la retención de líquidos, como el masaje linfático que si tu problema, por ejemplo, es la flaccidez de los glúteos (o de alguna otra zona) o la celulitis es recomendable realizarse drenaje linfático ya que debido a la estimulación del sistema linfático se eliminan toxinas y se nota una mejora en la piel. Para estos masajes, ¡hay que hidratarse bien!
Gimnasia, el cuerpo la necesita.
Los masajes reductores, no te harán bajar de peso rápido, bajar de peso en un mes ni por arte de magia a quien se los practique y se recomienda que siempre sean complemento de la actividad física, de ejercicios localizados en el abdomen, la cadera o las piernas y de un plan de alimentación saludable o dieta baja en carbohidratos (por ejemplo la dieta cetogénica).
En los casos de obesidad, planear una dieta que acelera el metabolismo puede ser un buen complemento hasta llegar a un peso más saludable donde se pueda optar por hacer ejercicios aeróbicos como caminar, correr o andar en bicicleta sin sufrir consecuencias.
SIEMPRE que se opte por hacer dieta, ésta deberá ser supervisada por un profesional para mantenernos saludables y asegurarnos de que nuestro cuerpo tiene todos los nutrientes que necesita para su correcto funcionamiento aunque se reduzca el aporte calórico. No se recomienda bajo ningún concepto dejar de comer.
La red de profesionales de Big Blue People cuenta con diferentes expertos que podrán ayudarte a modelar tu cuerpo con las maniobras necesarias, mantenerlo saludable sin ponerlo en peligro con dietas extremas y con sesiones de masajes relajantes e inolvidables que servirán de complemento para reducir tu talle.
Dieta saludable, la mejor aliada.
Llevar a cabo una dieta saludable previene diversos problemas en la salud como el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares a largo plazo, diabetes o presión arterial y, por supuesto mantener o perder peso. Adoptar buenos hábitos puede no ser lo más fácil del mundo pero existen alimentos y bebidas que colaboran con el metabolismo y hacen que no consumamos tantas calorías. No siempre los productos light son aquellos que tienen menos cantidad de grasas, carbohidratos o calorías y hay que estar atento a las letras chicas. Es evidente que un alfajor tendrá más calorías que una tostada, ¿pero qué pasa si unto la tostada con dulce de leche? ¿Y si me terminé el frasco? Lo importante también es medir porciones, agregar frutas, verduras (crudas y cocidas) o legumbres y comer cada cuatro horas un aperitivo o un snack saludable son excelentes opciones para no llegar a tener hambre y reducir calorías.